Viernes 25 de Abril de 2025
  • UF: $39.042,94
  • UF: $39.042,94
Viernes 25 de Abril de 2025
  • UTM: $68.306,00
  • UTM: $68.306,00
Viernes 25 de Abril de 2025
  • IVP: $40.347,15
  • IVP: $40.347,15
Viernes 25 de Abril de 2025
  • Dólar: $937,81
  • Dólar: $937,81
Viernes 25 de Abril de 2025
  • IPC: 0,50%
  • IPC: 0,50%
abril 25, 2025 9:55 am

Construcción y ciberseguridad ¿Cómo proteger datos en un sector en transformación digital?

Por: Eduardo Ricci Burgos, Abogado de Negocios en COHLERS+PARTNERS

En el sector de la construcción en Chile, la digitalización ha traído consigo grandes beneficios: optimización de procesos, reducción de costos y mayor transparencia en la gestión de proyectos. Sin embargo, también ha expuesto a las empresas constructoras a nuevas amenazas, especialmente en materia de protección de datos personales y ciberseguridad.

La Ley N° 19.628 sobre Protección de la Vida Privada y la aparición reciente de la nueva Ley de Protección de Datos Personales, en línea con el RGPD europeo, colocan a las empresas bajo un escrutinio creciente respecto al manejo de información sensible.

En el caso de las constructoras, la información recopilada en sus diversos procesos puede incluir datos de clientes, empleados, proveedores y proyectos, lo que las convierte en un objetivo interesante, sino atractivo para ciberataques diversos como ransomware o robo de información.

Uno de los principales desafíos en esta actividad es la falta de una cultura sólida de ciberseguridad, pues todavía en muchas empresas, sobre todo en las pequeñas y medianas empresas constructoras, las medidas de protección no están integradas en las operaciones diarias, dejando brechas que pueden ser explotadas por terceros mal intesionados. Además, la implementación de tecnologías emergentes como el IoT y el BIM incrementa la superficie de ataque, ya que estas soluciones requieren conexiones constantes a la red y manejo de grandes volúmenes de datos.

Para enfrentar estos retos, se estima que las constructoras pueden adoptar diversas soluciones innovadoras. Entre ellas, se pueden mencionar por ejemplo, la capacitación periódica y específica, al establecer programas de formación para empleados y subcontratistas, con el fin de prevenir errores humanos, que son una de las principales causas de incidentes en esta materia, las que, por lo demás, no son necesariamente tan costosas de implementar.

Por otro lado, se sugiere una ciberseguridad integrada en el BIM, mediante la incorporación de protocolos de seguridad directamente en estas plataformas, como autenticación multifactor, encriptación de datos y segmentación de redes, entre otras medidas necesarias y aconsejables.

Adicionalmente, la colaboración público-privada es vital con tales propósitos, pues crear alianzas con el gobierno, startups tecnológicas y universidades para la investigación y desarrollo de herramientas personalizadas es crucial para mantenerse atentos y al día con las amenazas emergentes cada vez más nocvedosas, intrincadas y peligrosas.

A lo anterior, cabe destacar las simulaciones y análisis predictivo que cobra cada día mayor relevancia, pues utilizar inteligencia artificial para simular posibles ataques y reforzar los sistemas antes de que ocurra un incidente es primordial como un buen mecanismo de defenas anticipada.

Además, es crucial que las constructoras realicen auditorías periódicas de ciberseguridad y adopten estándares internacionales, ya que ello no solo garantiza el cumplimiento normativo, sino que también fortalece la confianza con clientes e inversionistas.

De esta manera, y para concluir, se puede señalar que en un sector tan dinámico como el de la construcción, invertir en ciberseguridad no es solo una obligación legal, sino una estrategia clave para garantizar la continuidad operativa y la reputación corporativa en el competitivo mercado chileno.

Ciberseguridad y derecho de la construcción. Desafíos y soluciones innovadoras en Chile.

Por: Eduardo Ricci Burgos, Abogado de Negocios en COHLERS+PARTNERS

La digitalización del sector de la construcción en Chile ha transformado la manera en que se diseñan, gestionan y ejecutan proyectos.

El uso de tecnologías avanzadas como el BIM (Building Information Modeling), el Internet de las Cosas (IoT) y plataformas de gestión de proyectos ha aumentado significativamente la eficiencia y la transparencia. Sin embargo, esta evolución también ha expuesto a las empresas constructoras a un nuevo conjunto de riesgos relacionados con la ciberseguridad, que van desde el robo de datos sensibles hasta ataques de ransomware que pueden paralizar operaciones completas.

En el contexto jurídico chileno, el derecho de la construcción enfrenta la necesidad de adaptarse a este nuevo panorama digital, en el cual la protección de datos y la ciberseguridad se convierten en pilares fundamentales para garantizar la sostenibilidad y la confianza en el sector. La nueva Ley de Protección de Datos Personales que busca alinearse con estándares internacionales como el RGPD europeo, obligan a las empresas a implementar medidas estrictas para el manejo de datos sensibles.

Como principales desafíos específicos en el sector de la construcción, podemos visualizar, en primer lugar, un ecosistema complejo y descentralizado, pues los proyectos de construcción involucran múltiples actores (proveedores, subcontratistas, clientes y reguladores) que manejan y comparten datos críticos, lo que amplifica el riesgo de ciberataques.

A lo anterior, debe sumarse el hecho de que el negocio de la construcción maneja información estratégica altamente sensible, como planos, cronogramas y contratos diversos (financiamiento, proveedores, etc.) que contienen información que podría ser utilizada maliciosamente para extorsión o, eventualmente, sabotaje.

Además, la adopción de tecnologías emergentes, como herramientas como BIM e IoT amplían los blancos de ataque cibernéticos al requerir conexiones constantes a redes y almacenamiento de datos en la nube.

Así, y para abordar estos desafíos, el derecho de la construcción y las empresas del sector deben adoptar estrategias innovadoras que combinen aspectos legales, tecnológicos y organizativos, tales como, por ejemplo, la realización de contratos con cláusulas específicas de ciberseguridad, es decir, incorporar en los contratos de construcción cláusulas que regulen el manejo de datos sensibles, las responsabilidades en caso de ciberataques y las medidas de mitigación necesarias. Por ejemplo, exigir a subcontratistas el cumplimiento de estándares internacionales como la ISO 27001 puede reducir significativamente los riesgos.

Asimismo, implementar sistemas BIM que incluyan autenticación multifactor, encriptación de datos y monitoreo constante de accesos, resulta tan importante como la promoción del desarrollo de «gemelos digitales» que puedan operar en entornos aislados como medida de seguridad adicional.

Por otro lado, las posibles alianzas estratégicas de colaboración público-privadas, con organismos gubernamentales y empresas privadas como así también startups tecnológicas para diseñar soluciones específicas para el sector pueden ser de gran utilidad y mutuamente beneficiosas. Por ejemplo, el desarrollo de una plataforma nacional de ciberseguridad para la construcción podría centralizar la protección de datos y estandarizar los protocolos de seguridad.

El uso de inteligencia artificial y análisis predictivo, como aplicar herramientas de inteligencia artificial para identificar amenazas en tiempo real y realizar simulaciones de ciberataques, es otra idea, ya que esto permite a las empresas anticiparse a posibles vulnerabilidades antes de que sean explotadas.

Asimismo, las auditorías legales y técnicas regulares y periódicas que evalúen tanto el cumplimiento normativo como la eficacia de las medidas de ciberseguridad implementadas, asegurando que las empresas estén siempre un paso adelante en un entorno legislativo y tecnológico cambiante.

Finalmente, la capacitación especializada para actores del sector, siemrpe será necesaria en estos contextos evolutivos, promoviendo programas de formación en ciberseguridad específicos para el sector construcción, dirigidos tanto a empleados internos como a subcontratistas, con el fin de reducir errores humanos que puedan comprometer la seguridad de los datos.

El avance tecnológico en la construcción chilena no solo exige una transformación operativa, sino también un enfoque renovado desde el ámbito jurídico. Incorporar la ciberseguridad como eje central de la gestión empresarial y contractual es esencial para proteger la integridad de los datos y garantizar la continuidad operativa en un sector crítico para el desarrollo del país.

Con ello, las empresas que adopten un enfoque proactivo e integrador, combinando innovación tecnológica con cumplimiento normativo, para un desafío global, estarán mejor preparadas para enfrentar los desafíos del futuro y consolidar su posición en un mercado altamente competitivo.

En definitiva, la ciberseguridad no es solo una necesidad técnica, sino un imperativo estratégico y legal para el éxito sostenible en la era digital.

Ciberseguridad en Chile: Desafíos críticos para este año 2025

Por: Patricio Campos, Gerente General, Resility.io

En un mundo cada vez más digitalizado, la ciberseguridad ha dejado de ser una preocupación exclusiva de los especialistas técnicos. Hoy, es una prioridad nacional y un asunto de seguridad ciudadana. Chile no es ajeno a esta realidad: el país enfrenta amenazas cibernéticas crecientes que ponen en jaque sus infraestructuras críticas y la confianza de sus ciudadanos.

De acuerdo con el Foro Económico Mundial, los ciberataques se encuentran entre los principales riesgos globales, mientras que la OCDE ha subrayado la urgencia de reforzar la ciberseguridad en sectores clave como energía, salud y transporte. En Chile, episodios como el ataque al Ministerio de Justicia, que expuso datos sensibles del SENAME, y el reciente ransomware que afectó a la Fundación Arturo López Pérez en 2024, ilustran la fragilidad del ecosistema digital chileno.

En este escenario, las infraestructuras críticas son un blanco atractivo para actores malintencionados, incluyendo ransomware y ataques patrocinados por otros Estados. En otros países, incidentes como el hackeo al oleoducto Colonial Pipeline, en Estados Unidos, demuestran cómo un solo ataque puede generar caos económico y social. Chile, con su creciente dependencia de sistemas interconectados, no está exento de estos riesgos.

Las pymes: motor de empleo, pero vulnerables

Las pymes chilenas, que representan el 98,6% de las empresas y generan el 65,3% del empleo formal, suelen carecer de recursos para implementar medidas de seguridad informática robustas. Aunque iniciativas como las certificaciones en ciberseguridad impulsadas por el Ministerio de Economía son positivas, su alcance es limitado. Un ejemplo inspirador es el «Kit Digital» en España, que provee soluciones básicas de ciberseguridad a través de proveedores especializados.

También debemos considerar que el impacto económico de los ciberataques es significativo. Según estimaciones del Foro Económico Mundial, el costo global del cibercrimen podría alcanzar los 10,5 billones de dólares anuales para 2025. En nuestro país, un ataque exitoso contra infraestructuras críticas podría desencadenar pérdidas directas, dañar la reputación del país y desalentar inversiones extranjeras.

Ante este panorama, urge tomar medidas concretas para fortalecer la ciberseguridad en Chile. Propongo los siguientes pasos:

  • Fortalecer la Agencia Nacional de Ciberseguridad: Dotarla de recursos humanos, financieros y tecnológicos para enfrentar amenazas en tiempo real.
  • Promover la colaboración público-privada: Crear plataformas de intercambio de información entre sectores públicos y privados para coordinar respuestas.
  • Educar y concientizar: Implementar programas educativos que fomenten una cultura de ciberseguridad desde la escuela hasta el ámbito laboral.
  • Actualizar la legislación: Diseñar marcos legales modernos que incluyan sanciones claras y medidas preventivas eficaces.
  • Evaluación constante de riesgos: Realizar auditorías periódicas en infraestructuras críticas para identificar vulnerabilidades.
  • Fomentar la participación internacional: Integrarse a iniciativas globales lideradas por organizaciones como la ONU y el Foro Económico Mundial.

Chile tiene el potencial para convertirse en un referente regional en ciberseguridad, pero alcanzar este objetivo requiere una estrategia integral y colaborativa. La seguridad cibernética no es solo una necesidad técnica; es una garantía de desarrollo, estabilidad y confianza para el futuro del país.

Los riesgos en ciberseguridad para las Startups

Por: Fernando Abrego, CEO de VeData Group

En el acelerado mundo de las startups, donde la innovación y el crecimiento son la prioridad, la ciberseguridad puede pasar a un segundo plano. Sin embargo, la transformación digital y la creciente dependencia de la tecnología también la han convertido en un tema crucial y que ya no sea considerado como una tarea secundaria.

Las prácticas básicas de protección, como la formación del equipo en seguridad digital o la gestión adecuada de contraseñas y el cifrado de datos sensibles se ha vuelto una prioridad.

Mientras las grandes empresas tienen recursos y equipos dedicados para proteger sus sistemas, las startups suelen enfrentar desafíos en este ámbito, con recursos limitados tanto financieros como humanos, por ello, implementar soluciones de ciberseguridad se convierte en una tarea costosa tanto por el presupuesto como la disponibilidad de personal especializado para gestionarlas.

Sin embargo, la rapidez de las empresas emergentes para adaptarse a nuevas soluciones tecnológicas les permite implementar sistemas de ciberseguridad modernos y eficientes, diseñados específicamente para proteger infraestructuras basadas en la nube. Además, al no depender de sistemas heredados, pueden integrar soluciones avanzadas desde el inicio.

Al priorizar la ciberseguridad, una startup no solo protege sus datos, sino también la confianza de sus clientes.

Tener protocolos de seguridad robustos puede ser una ventaja competitiva frente a competidores que descuidan este aspecto. Los clientes valoran la seguridad de su información y están dispuestos a trabajar con empresas que demuestren compromiso con la protección de datos.

Adoptar prácticas de ciberseguridad adecuadas permite cumplir con lA regulaciones locales e internacionales. Cumplir con normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) o la Ley de Protección de Datos Personales en Chile, garantiza que la empresa no enfrente sanciones por negligencias de seguridad.

Para las startups, la ciberseguridad es un desafío. Mientras que implementarla desde el principio ofrece claras ventajas, como la protección de datos y una mejor reputación, las barreras de costos y la falta de conocimiento especializado pueden hacer que este tema se posponga.

No obstante, los riesgos a los que se exponen al no priorizar la ciberseguridad pueden ser devastadores. Las startups deben ser conscientes de que la inversión en ciberseguridad no es opcional, sino una necesidad crítica para su crecimiento y sostenibilidad en el mercado actual.

Un tema adicional muy importante para considerar también en este ecosistema de startups dice relación con el uso intensivo de la IA, la cual continúa avanzando, pero también se ha convertido en un poderoso desafío para la ciberseguridad. Dado que las amenazas cibernéticas han evolucionado en complejidad e ingenio.

Es debido a esto, que la IA se debe utilizar con cautela, ya que, aunque ofrece grandes beneficios en este ámbito, también puede ser aprovechada por los hackers para perfeccionar sus tácticas convirtiéndola en una amenaza.

Ciberseguridad en el hogar: Una necesidad en la era digital

En un contexto de creciente conectividad y dependencia de dispositivos inteligentes, la ciberseguridad en el hogar ha pasado de ser una simple opción a una necesidad crítica.

Por: Equipo Mercados Inmobiliarios

A medida que el número de dispositivos conectados en las viviendas aumenta exponencialmente, los hogares están más expuestos a vulnerabilidades y ataques cibernéticos. De acuerdo con expertos, proteger la red doméstica es esencial para garantizar la privacidad y seguridad de sus habitantes.

En la actualidad, los hogares no solo cuentan con computadoras y teléfonos móviles conectados a internet, sino también con dispositivos inteligentes como cámaras de seguridad, cerraduras electrónicas, asistentes virtuales y electrodomésticos. Estos avances, aunque mejoran la calidad de vida, también abren puertas a posibles riesgos si no se implementan las medidas de protección adecuadas. Un informe reciente destacó que muchos de estos dispositivos no vienen configurados con sistemas de seguridad robustos, lo que los hace vulnerables a intrusiones externas.

“Un ejemplo de ello es la seguridad ciudadana a gran escala, como el proyecto de Sistema Interconectado de Televigilancia con Inteligencia Artificial (SITIA), presentado por el gobierno, que cuenta con cámaras y dispositivos de televigilancia en base a IA”, señala Iván Llanos, académico de la Escuela de Ciberseguridad de Universidad de Las Américas.

Uno de los principales desafíos que enfrentan los hogares es la falta de concienciación sobre la ciberseguridad. Las personas tienden a subestimar los riesgos al no cambiar las contraseñas predeterminadas o no actualizar regularmente el firmware de los dispositivos conectados. Esta negligencia facilita el acceso de cibercriminales, que pueden interceptar información privada o tomar el control de los sistemas de seguridad domésticos.

Las soluciones de ciberseguridad para el hogar han evolucionado en los últimos años, permitiendo a los usuarios proteger sus redes y dispositivos de manera más sencilla.

“Se observan sistemas domésticos fortalecidos en seguridad como el acceso y control de visitas en condominios con sistemas que permiten la gestión y control de visitas a los edificios y de esta manera proteger a los residentes, así como brindarles notificaciones, gestión y otros elementos”, explica Iván Llanos,

Desde enrutadores con protección avanzada hasta aplicaciones móviles que monitorizan el tráfico de la red, el mercado ofrece diversas herramientas que aseguran una primera línea de defensa efectiva. Sin embargo, el componente clave sigue siendo la educación: los usuarios deben estar informados sobre cómo reconocer las amenazas y actuar preventivamente.

El experto enfatiza en que “no solo las organizaciones deben incorporar la ciberseguridad en sus procesos cotidianos, sino que también las personas tienen que aprender a implementarla en sus hogares, dado que cada día hay más dispositivos interconectados, teniendo como ejemplo los diversos teléfonos, tablets, notebooks, Alexa u otros asistentes, IPTV, Chromecast, domótica y una serie de aparatos con Internet (IoT), todos con acceso a nuestras redes, cuentas e incluso tarjetas de crédito”.

Además, el auge del teletrabajo ha agregado otra capa de complejidad a la seguridad doméstica. Las redes del hogar ahora manejan no solo la información personal, sino también datos corporativos, lo que las convierte en un blanco más atractivo para los atacantes. Los expertos recomiendan el uso de redes privadas virtuales (VPN) y la implementación de autenticación multifactor para garantizar la protección de los datos tanto a nivel personal como profesional.

¿Cuál es el riesgo?

El profesional de UDLA señala que hoy todos los dispositivos pueden transmitir información, interconectarse con otros e intercambiar data con o sin nuestro consentimiento.

Por lo mismo, es muy importante saber delimitar estos aparatos y poner las medidas de protección adecuadas para proteger nuestra información personal y la de nuestra familia. En esta línea, el profesional comparte las siguientes recomendaciones:

Antes de la compra de un dispositivo, verificar las certificaciones de calidad que posee y las posibles falencias físicas y de seguridad que este pudiera tener anunciadas en foros, blogs, etc. Al contar con los dispositivos, conocer las medidas de seguridad que este tiene antes de ingresar cualquier dato sensible.

Cambiar contraseñas y configuraciones por defecto que tenga el dispositivo para mejorarlas de acuerdo con las necesidades del usuario. En lo posible no conectar los aparatos a redes públicas o gratuitas, solo a redes de confianza. Configurar controles parentales para el acceso de los menores de edad y modificar periódicamente contraseñas y registrarlas en un lugar seguro.

abril 25, 2025 9:55 am
Viernes 25 de Abril de 2025
  • UF: $39.042,94
  • UF: $39.042,94
  • Dólar: $937,81
  • Dólar: $937,81
  • IPC: 0,50%
  • UTM: $68.306,00
  • IPC: 0,50%
  • IVP: $40.347,15
  • UTM: $68.306,00
  • IVP: $40.347,15