Este 30 de noviembre a las 22.30 la Ruta 5 norte, entre La Serena y Vallenar, estará a oscuras y un grupo de investigadores, junto a invitados de otras zonas, verán el impacto de las luminarias de la ruta 5 en los observatorios La Silla y Las Campanas.
Por: Equipo Mercados Inmobiliarios
Un evento científico de suma relevancia para el conocimiento astronómico se vivirá este sábado 30 de noviembre en la ruta 5 Norte, entre el kilómetro 554 y el 654, que va desde La Serena a Vallenar.
Hasta allí llegarán astrónomos de la Universidad de La Serena que van a medir por primera vez in situ en dicha carretera, el impacto de la contaminación lumínica en los observatorios de La Silla y Las Campanas, ubicados en la Región de Coquimbo, en el límite con la Región de Atacama.
Para ello van a utilizar dos cámaras SQC, que están diseñadas y calibradas especialmente para la medición del brillo del cielo nocturno. Y un espectrógrafo portátil único en el mundo, que es un instrumento que nos entrega el flujo de la luz en distintas longitudes de onda y esto permite cuantificar el brillo del cielo nocturno y estimar la contaminación lumínica en los observatorios.
Este 30 de noviembre se llevará a cabo la actividad “Apagón por Nuestros Cielos”, iniciativa organizada por la “Comisión por el Cuidado de los Cielos Nocturnos”, encabezada por el académico del Departamento de Astronomía de la Universidad de La Serena, Marcelo Jaque; el estudiante del Doctorado de Astronomía de dicha institución, Juan Pablo Chima; y los ex académicos de la ULS Rodolfo Angeloni y Guillermo Damke.
Sobre la importancia que tiene la realización de este evento para el departamento de la casa de estudios, Jaque indicó que “esto viene a completar mucho tiempo de trabajo y significa subir un escalón en todo el camino que estamos recorriendo por el cuidado de los cielos, nos acerca mucho al territorio, estamos dándole pertinencia territorial a la ciencia que estamos haciendo, lo cual es muy importante para la institución y la sociedad”.
Por su parte, Juan Pablo Uchima, señala que “un apagón de este tipo requiere un gran esfuerzo por parte de los investigadores del departamento y nos servirá para corroborar algunas hipótesis, así como también dar respuestas a las necesidades de algunos observatorios. Podremos obtener un contraste con una noche previa respecto a la contaminación lumínica en la cuarta región y entregar datos reales a los encargados de tomar decisiones”.
Respecto a cómo se ha gestado esta actividad desde el punto de vista investigativo, Marcelo Jaque, señala que “nosotros como universidad venimos haciendo un trabajo de varios años, con distintos proyectos como “ilumina conciencia” mediante el cual realizamos una red de monitoreo del brillo del cielo nocturno en tiempo real y constante en toda la región. Hemos participado en otros apagones, realizamos campañas de observación en observatorios turísticos y somos parte de la comisión organizadora de esta actividad. Tenemos un historial de varios años trabajando con la contaminación lumínica y, con esa experiencia, se le planteó a la mesa realizar un nuevo apagón, el cual tendrá gran relevancia científica”.
El objetivo del “Apagón por Nuestros Cielos” es sensibilizar a la comunidad y autoridades sobre la importancia de proteger los cielos nocturnos y el patrimonio astronómico de la Región de Coquimbo. Para esto, durante media hora, se apagará la iluminación pública en localidades específicas para evaluar el impacto de la contaminación lumínica sobre los cielos, la biodiversidad y la salud humana. Esta iniciativa permitirá recopilar y mejorar los datos sobre contaminación lumínica mediante mediciones realizadas por astrónomos destacados de la región.
En diciembre de 2021 se conformó la Mesa de Trabajo Regional por el Cuidado de los Cielos Nocturnos, con el objetivo de proteger los cielos de la región que, destacando el Valle de Elqui, concentran casi el 50% de la oferta nacional de astroturismo y albergan 14 observatorios turísticos y astronómicos, entre los que se destacan Cerro Tololo, La Silla, Cruz del Sur, Gemini, Mamalluca y Collowara, entre otros.