Señor Director,
El sector inmobiliario está experimentando una creciente tendencia: demandas a municipios por daños debido a la falta de servicios. El reportaje del El Diario Financiero del pasado lunes destaca cómo esta tendencia está cambiando el sector. Recientemente, una inmobiliaria demandó a un municipio por daños causados por la ausencia de servicios, marcando un precedente.
Las inmobiliarias ahora exigen compensaciones, reflejando un giro hacia una mayor confrontación judicial.
Con el Estado retrasando o negando servicios, las demandas por indemnización aumentan, y también las querellas por prevaricación contra funcionarios públicos. Esta nueva realidad requiere que el sector inmobiliario exija lo que corresponde cuando se cumplen las leyes.
La pasividad por temor a represalias ha limitado las reclamaciones oportunas.
Este fenómeno también afecta a los bancos, que deben reanalizar a sus clientes para evaluar el riesgo de financiamiento. ¿Cómo es posible que un proyecto espere años para su recepción municipal sin acción de sus líderes? Los errores y demoras no reportados pueden generar un riesgo reputacional significativo, reflejados en los costos financieros para clientes complicados.
Por: Rodrigo Andreucci, Socio en Andreucci y Torrejón Abogados.