Por: José Ignacio Maturana, gerente inmobiliario Norte Verde.
El mercado inmobiliario ha sido históricamente un refugio seguro para los inversionistas, y el sector de departamentos se mantiene como una opción atractiva.
A pesar del actual escenario económico, marcado por tasas de interés elevadas y mayores restricciones para acceder a financiamiento, la compra de departamentos sigue siendo una inversión inteligente y conveniente.
El mercado inmobiliario no solo ofrece estabilidad y seguridad, sino también la posibilidad de crecimiento sostenido y diversificación en tiempos de incertidumbre.
¿Razones?
A diferencia de otros activos financieros, los bienes raíces son tangibles y menos susceptibles a las fluctuaciones diarias del mercado. Esto, porque los departamentos, especialmente ubicados en zonas estratégicas y comunas con profundidad de mercado, incrementan su plusvalía con el tiempo y generan ingresos constantes a través del arriendo.
Demanda constante de propiedades para renta. Impulsado por la preferencia por vivir en zonas urbanas bien conectadas, con servicios de calidad, áreas verdes y vida de barrio, sumada a la creciente movilidad laboral. Incluso en un escenario de tasas de interés elevadas, es posible obtener retornos de inversión atractivos, siempre y cuando se seleccione cuidadosamente la propiedad.
Diversificación del portafolio de inversión. Invertir en departamentos no solo genera ingresos pasivos, sino que también permite a los inversionistas diversificar sus activos, disminuyendo el riesgo general de su cartera.
Las tasas de interés, aunque actualmente elevadas, son variables. Con el tiempo, es probable que las condiciones económicas mejoren y las tasas disminuyan, lo que permitirá a los inversionistas refinanciar en términos más favorables. Mientras tanto, ingresar al mercado ahora permite aprovechar precios competitivos y promociones atractivas de las inmobiliarias especialmente en proyectos con entrega inmediata.