Por: Gerardo Ureta Campos, Doctor(c) en Industria Inteligente, Socio Fundador de Economía Urbana | Ciencia de Datos Urbanos e Inmobiliarios
En un escenario marcado por el alza de las tasas de interés, que a octubre de 2024 algunos bancos llegan hasta un 6,5% en Chile para un plazo de 25 años, el sector inmobiliario enfrenta desafíos considerables. El encarecimiento del financiamiento ha impactado tanto a inversionistas como a compradores de vivienda, afectando la demanda y reduciendo las posibilidades de acceso a créditos hipotecarios. Un crédito de 3.000 UF ha visto un aumento del 30% en sus dividendos, lo que ha frenado significativamente la adquisición de viviendas y ha llevado a constructoras a reevaluar o cancelar proyectos en zonas de alta demanda como Santiago.
Propuesta conjunta para reducir dividendos hipotecarios
En respuesta a esta situación, el Ministerio de Hacienda, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, la CChC y los bancos han trabajado en una propuesta para reducir el impacto de las altas tasas. En octubre de 2024, se anunció un plan para disminuir en 2 puntos porcentuales las tasas de interés de créditos hipotecarios, especialmente para viviendas de hasta 4.000 UF, lo que reduciría los dividendos mensuales entre un 16% y un 17%. Este esfuerzo busca aliviar la presión sobre las familias, impulsar la demanda y reactivar la inversión en proyectos inmobiliarios detenidos.
La propuesta también incluye un subsidio estatal y la creación de un fondo de garantías hipotecarias, que reducirá el riesgo para los bancos al momento de otorgar créditos a sectores vulnerables y familias de clase media. Esta medida no solo fomentaría el acceso a la vivienda, sino que también dinamizaría el sector, beneficiando a más de 30.000 familias al año y generando un crecimiento del 2% en el sector de la construcción para 2025.
La importancia de la ciencia de datos urbanos e inmobiliarios
Ante este escenario, es crucial aprovechar herramientas avanzadas como la ciencia de datos urbanos e inmobiliarios para tomar decisiones más informadas y eficientes en un entorno incierto. El análisis de grandes volúmenes de datos permite anticipar tendencias, evaluar riesgos y optimizar inversiones en el mercado inmobiliario, especialmente en momentos de volatilidad económica.
En Economía Urbana (www.economiaurbana.cl), trabajamos con este enfoque, aplicando ciencia de datos a la planificación urbana y al mercado inmobiliario para proporcionar a nuestros clientes, tanto públicos como privados, una visión más clara de las oportunidades y riesgos. Este enfoque no solo mejora la toma de decisiones estratégicas, sino que también contribuye a generar soluciones más sostenibles y adaptadas a las necesidades reales del mercado.
Perspectivas para inversionistas
Para los inversionistas inmobiliarios, este escenario ha implicado una revisión de sus estrategias. El encarecimiento de los créditos ha reducido las tasas de retorno de muchos proyectos, lo que ha obligado a los desarrolladores a buscar formas más eficientes y sostenibles de gestionar sus inversiones. Proyectos de arriendo con opción de compra o desarrollos orientados a la renta residencial se presentan como alternativas para sortear la incertidumbre del mercado, con modelos que permiten mayor flexibilidad y menos exposición a las fluctuaciones del financiamiento hipotecario.
La tendencia hacia la densificación urbana también podría ganar fuerza, ya que los inversionistas se ven presionados a optimizar el uso del suelo disponible en las grandes ciudades. Esta densificación puede contribuir a aliviar el déficit habitacional en zonas urbanas, aunque podría generar tensiones sociales en torno a la gentrificación y el acceso equitativo a la vivienda.
Finalmente…
Si bien la propuesta del gobierno y los bancos es un paso importante hacia la reactivación del mercado, el éxito dependerá de su implementación efectiva. A largo plazo, el uso de ciencia de datos urbanos será crucial para adaptarse a nuevas realidades económicas y sociales, optimizando las inversiones y ofreciendo soluciones innovadoras tanto en el desarrollo de viviendas como en la planificación urbana.
En resumen, la crisis provocada por el alza de las tasas de interés está obligando a todos los actores del sector inmobiliario a adaptarse. La combinación de medidas económicas, como las propuestas del gobierno, y el uso de herramientas avanzadas como la ciencia de datos, ofrecerá una ventaja competitiva a quienes sepan interpretar y anticipar los cambios en el mercado.